Se trató de un trabajo prácticamente perfecto del escocés que sumó 36 winners en el partido y apenas 6 errores no forzados. Además, no dio chance de quiebre alguna con su servicio.
Un comienzo tremendamente parejo entre Murray y Kyrgios, con los sacadores como los dominadores. Sin llegar a deuce en todo el set, el escocés presionó sobre el cierre y quedó con triple set point desde la devolución. El australiano, no obstante, reaccionó en dos ocasiones, pero en la tercera dejó una increíble volea de derecha -con toda la cancha a su merced- en la red. 7-5 y primera ventaja en 44 minutos.
Con la ventaja, Murray se hizo dueño absoluto del encuentro. Después de salir de un game cerrado con su servicio, el británico firmó un veloz quiebre para el 3-1 y rompió la resistencia del australiano. Con el nivel en alza, 12-4 en los siguientes tres juegos y segundo set (6-1) también en su poder. Un dato a tener en cuenta: Murray cerró el set con nueve tiros ganadores y apenas un error no forzado.
El escocés jamás dio lugar para la recuperación de Kyrgios. Con un juego agresivo y con pocas fallas, el local volvió a golpear desde la devolución en el inicio y aplicó un 3-1 que pareció sentencia. Siempre en posición de mando, Murray llegó a tener dos match points en el 5-3, pero tuvo que esperar un juego más para cerrar la historia finalmente en sets corridos: 7-5, 6-1 y 6-4.
Antes, Federer abrió la acción en la octava jornada con un claro triunfo ante Steve Johnson (29º) por 6-2, 6-3 y 7-5. Para el número 3 del mundo, es el momento de demostrar si tiene actualidad para vestirse de candidato ante la eliminación del Nº1. Precisamente, el serbio había superado al suizo en las dos finales pasadas en Londres y ahora no está en su camino en lo que se presumía iba a ser una semifinal.
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