Serena, próxima a cumplir 34 años, le ganó el duelo generacional a Keys (19ª en el ranking mundial), de 20, que aparecía como seria amenaza, por 6-3 y 6-3. Y en el horizonte más cercano ya está Venus, su hermana de 35. Por eso, se trata de un duelo especial, por el momento histórico que puede vivir la menor de las Williams, en busca de un hito histórico.
Por segunda vez en dos cruces, Serena pudo con Keys. En potencia y, en especial en determinación, se impuso la líder clara del circuito. Con el 79% de los puntos logrados con su primer saque, la favorita de todos marcó la diferencia en un partido que se presumía electrizante y muy atractivo, pero careció de brillo y fue pobre, con escasos peloteos desde la base y la convicción de la ganadora que resultó clave en los puntos vitales.
Más temprano, Venus Williams arrancó la jornada con una sencilla victoria. Luego de derrotar a la peligrosa suiza Belinda Bencic (12ª), la hoy Nº23 del mundo y exreina ahora no tuvo problemas para vencer a la estonia Anett Kontaveit (152ª ) por 6-2 y 6-1 en apenas 52 minutos de juego. Por eso, se viene otro choque sensacional entre las hermanas, el 27º. Serena domina por 15-11 y se llevó el último, hace dos meses, en octavos de Wimbledon, en sets corridos.
Por lo pronto, este domingo sumaron nuevas marcas: Serena llegó por 42ª vez a cuartos de final en los Majors y así empató la tercera marca, en poder de Graf, mientras que Venus alcanzó por 35ª ocasión esa ronda en los Grand Slam y es el quinto registro, al superar a la española Arantxa Sánchez.
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