Thompson y sus representantes tenían hasta la medianoche pasada para optar por aceptar unilateralmente los 6,8 millones de dólares de la oferta cualificada y jugar por ese salario, mucho más bajo del que ellos buscan, la temporada 2015-16 a cambio de convertirse en agente libre sin restricciones el próximo verano.
Una vez vencida la oferta, ya no caben decisiones unilaterales sino sólo un acuerdo entre la franquicia y un jugador que queda en situación de bloqueo, sin contrato en Cleveland, pero sin poder firmar libremente con cualquier otro equipo.
Thompson puede seguir hablando con otros equipos en busca de una oferta en firme que presentar a los Cavs, quienes podrían igualarla, aunque, dado que la mayor parte de ellos tienen cerradas sus plantillas y agotado su espacio salarial, esto se antoja más que improbable y todo parece pasar por que ambas partes lleguen a un entendimiento.
Tristan Thompson ha dado un paso más en su dura estrategia de negociación con la franquicia al dejar que venza el plazo de la oferta cualificada presentada por el equipo sin aceptarla. La única salida ahora es que ambas partes se pongan de acuerdo.
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