Rousey inició agresiva, incluso sin chocar guantes con Holm, luego del episodio durante el pesaje en el que tuvieron que ser separadas cuando Holm puso el puño sobre el rostro de la aún campeona. Holm esperó los ataques infructuosos de Rousey y contragolpeaba, conectando los mejores impactos, llevándose las tarjetas en el primer asalto 10-9.
Fue la primera vez desde el 28 de diciembre del 2013 que Rousey pasó del primer round en sus peleas.
Para el segundo round, Holm se notaba más cómoda dentro del octágono y Rousey parecía tener sentido de urgencia, lanzando al frente y errando sus intentos, cayendo incluso de rodillas sobre la lona al no encontrar el rostro de Holm. Holm aprovechó el ímpetu de Rousey, quien al errar un golpe quedó de espaldas y aprovechó para conectar una patada a la cabeza que envió a Rousey a la lona, donde la castigó hasta la intervención del réferi Herb Dean, dando por finalizado el combate.
Con su victoria, Holm extendió su marca invicta a 10-0, mientras que Rousey perdió la primera pelea de su carrera y se quedó en 12-1.
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