Cuando se oficializó el cambio protagonizado por Isaiah Thomas, Jae Crowder, Ante Zizic y la selección de los Brooklyn Nets por Kyrie Irving, para muchos quedó bastante claro cual era el plan de Danny Ainge (GM de los Celtics). Sus últimas dos selecciones principales del Draft en los últimos años son intocables, refiriéndonos a los jóvenes Jaylen Brown y Jason Tatum.
Ambos fueron la tercera selección de sus respectivos certámenes y cuentan con características similares en cuanto a su madurez mental y de juego. Por algo sus nombres nunca fueron mencionados en un posible movimiento a Cleveland o cualquier otro equipo, pues su rol en el futuro de Boston es vital.
Sin embargo, esto ha salido a un precio para los Celtics: la experiencia. La plantilla es bastante joven, talentosa y con mucho potencial, pero cuenta con miembros que poco se han mantenido en el equipo. El más longevo en este momento sería el base Marcus Smart, seleccionado por los Celtics en el Draft del año 2013.
Brown cuenta con una ventaja en cuanto tiempo de juego sobre Tatum debido a ya haber pasado su temporada de novato mostrando mucha capacidad para absorber un rol de más peso, pero ambos serán parte importante de la rotación de Brad Stevens (coach de los Celtics).
Los titulares hasta el momento serían los recién incorporados Gordon Hayward y Marcus Morris, con la posibilidad de que Jaylen se posicione como un escolta y juegue de número 2 en la alineación, pero nos quedará más claro en el inicio de la pretemporada. A pesar de todo esto, los Celtics tienen uno de los mejores conjuntos en toda la NBA y son favoritos para competir por el dominio de la Conferencia Este.
No hay comentarios:
Publicar un comentario