El ala-pívot de los Golden State Warriors, Draymond Green, tuvo un incidente con el escolta-alero de los Washington Wizards, Bradley Beal, el fin de semana. Beal dio un golpe en la cara a Green y ambos terminaron en el suelo para luego ser expulsados del compromiso.
La NBA multó a Beal con $50.000 mil dólares mientras que la multa hacia Green fue de $25.000 dólares. El coach de los Warriors, Steve Kerr, se llenó de ira por esa resolución de la liga.
"Un poco confundido", dijo Kerr en la rueda de prensa de la jornada de ayer luego de que su equipo perdiera ante los Detroit Pistons. "No sé cómo te pueden multar con $25.000 mil dólares por ser atacado", agregó el mandamás de los actuales campeones que por estos comentarios puede ser sancionada también.
Se le debe dar razón un poco a Kerr por defender a su jugador, que esta vez, no tuvo la culpa del altercado. Incluso el jugador dijo que lo que hizo tras ser atacado por Beal era lo correcto y que lo golpeó dos veces.
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