Mucho antes de que los Tigres entrasen en este período de reconstrucción, el dominicano Jairo Labourt fue parte del último gran cambio del club que incluyó a un ganador del Cy Young.
Labourt afirmó que cuando se unió a la organización de los Tigres como parte del cambio que llevó a David Price a Toronto en el 2015, pensó que su carrera había terminado. No entendía cómo funcionaba eso de las transacciones entre equipos. Pero ahora dice que fue lo mejor que le ha pasado en su carrera.
El ascenso de Labourt en septiembre fue una buena recompensa para el joven de 23 años, quien viene de tener su mejor temporada en el sistema de liga menor de los Tigres, incluido un llamado al Juego de las Futuras Estrellas. Después de muchos problemas como abridor, el paso al bullpen a finales de la campaña pasada ha resultado ser una bendición.
Como abridor, de acuerdo con el propio Labourt, tuvo problemas repitiendo su mecánica y localizando sus pitcheos de forma consistente. Como relevista, a pesar de tener menos trabajo, la posibilidad de lanzar con todas sus fuerzas en cada pitcheo lo han ayudado a mantener la forma. Y más allá de eso, su confianza ha crecido.
Labourt dejó 2.17 de efectividad en tres paradas distintas en las menores antes del ascenso, permitiendo sólo 43 hits en 66.1 innings con 79 ponches. Sus problemas de control desaparecieron hasta que llegó a Triple-A Toledo, donde dio 23 boletos en 22 innings, casi el doble de los hits que recibió (12).
El zurdo dice saber que para poder mantenerse en las Grandes Ligas, tiene que tirar strikes. Este mes tendrá la oportunidad para demostrar si capaz de hacerlo. Ha dado dos boletos en igual número de presentaciones, y además tiró un par de lanzamientos descontrolados contra la malla el domingo. Pero con cuatro semanas por delante, tiene suficiente tiempo para demostrar su valía.
No hay comentarios:
Publicar un comentario